YO SÍ HE LEÍDO TRES LIBROS

Y pensar, digo yo, que un día me escandalicé porque un policía del retén de la carretera a Tuxtla no nos quiso levantar una infracción, “a fuerzas quiere mordida”, pensé, pero pensé mal porque lo que pasaba es que era analfabeto. Se lo preguntamos: ¿qué no sabes escribir? Y simplemente dijo: pos no. A mí me pareció una falta grandísima de respeto a los ciudadanos poner policías analfabetos y con rifle en retenes para que pidan documentos, quiten placas y hagan lo que se les dé la gana, creo firmemente que hay una gran diferencia en el cerebro de quienes saben leer y escribir y en el de los que no saben.

En fin, nuestro futuro presidente del país no sabe lo que es un libro, bueno los conoce porque los distingue de un zapato y de un sartén, pero nada más (aunque dice que escribió uno y ni ese uno ha leído)

Cuando yo era muy joven y empecé a trabajar era maestra de Español en una escuela de niños ricos y, como yo era joven y empezaba a trabajar, pensaba que junto con la enseñanza académica era mi obligación ayudar a los niños a formarse como personas y por eso les hablaba de aquello en lo que yo creo, como por ejemplo: la honradez. Así, un día que les contaba yo de la gran persona que es aquel que devuelve una cartera que se encuentra tirada, del que les paga bien a sus trabajadores, del que no abusa económicamente de quien tiene necesidad y demás, un niñito de diez años me interrumpió y me dijo: “perdón maestra, pero todo lo que usted dice no es cierto porque mi papá me ha dicho mil veces que en esta vida el que tranza avanza”. Fin de mi discurso para el desarrollo humano, muchos de esos niños dejaron de importarme ese día porque era una lucha sin ventajas para mí.

La lucha de los ciudadanos mexicanos por tener en el poder a quien vea por ellos y respete lo de la democracia y la transparencia y cuanta cosa dicen para envolvernos, pues es también una lucha sin ventajas, es como pelear contra una pared de concreto, porque pese a todo el candidato analfabeto va a ser nuestro Presidente, lo puedo ver.

Lo que yo he visto también en mi país y en muchos otros es que la falta de educación del pueblo no es una casualidad, pueblo educado es pueblo pensante, es pueblo crítico, es pueblo exigente de sus derechos. Por eso la educación en México seguirá en su eterno rezago porque es un elemento importantísimo para mantener el estado de corrupción en el que vivimos, no hay sindicato peor en México que el de los maestros y no hay gente tan ignorante en el mundo como muchos de los maestros de nuestro sistema federal, lo digo porque los conozco, ojalá lo estuviera yo inventando.

En fin, a lo mejor en el próximo sexenio se exige en las escuelas que desde el director hasta el más pequeño alumno lean tres libros en su vida, así ningún mexicano tendrá que hacer el ridículo internacional más grande de nuestra historia como el que logró nuestro futuro Primer Mandatario.

Y que VIVA MEXICO, VIVA LA DEMOCRACIA Y VIVA EL DESARROLLO DE LA NACIÓN!!!!