Hoy empieza el mes de la Patria y ya venden banderitas en todas las esquinas, vuelvo a pensar qué es para mí todo esto de septiembre, de la Patria, la bandera; y encuentro que hoy, como cuando yo era niña, mi pensamiento y mi corazón siguen en lo mismo…
No puedo escribir sobre la Patria. Ni siquiera estoy segura si se escribe con mayúscula, si es nombre propio o común. La maestra dijo que hiciéramos una composición de dos cuartillas sobre la Patria porque es Día de la Bandera y yo de la patria no puedo escribir.
La Patria es tesoro en el corazón, dice mi papá y tampoco entiendo nada hasta que me dice que tesoro y amor se parecen y que en el corazón se guardan los cariños como el que le tengo a mi perra y lo que quiero a mi mejor amiga y a mi abuelita y a mis primos. Empiezo, escribo...escribo porque patria-tesoros es algo más claro como mi muñeca Patricia, mi abuelita, mis dos primos grandes, que se va clarificando con lo del cariño: mi perra, mi casa, mis juguetes, los vecinos que juegan con nosotros ¡cómo quiero a la Patria! Creo que sí debe escribirse con mayúscula, que sí es nombre propio como el de Don Pepe que arregla mi bicicleta, mi tía Isabel; y faltan todavía los tesoros-lugares de la playa, la iglesia, la tienda grande de juguetes, la pista de patines, el zoológico.
Escribo: la Patria es alegría y es tesoro del corazón y pienso que a lo mejor debe ir toda la PATRIA con mayúsculas porque es nombre propio, grande y alegre que guarda todos los cariños; pero tengo que escribir también que la PATRIA es triste porque los vecinos son muy pobres y a veces no comen bien y Santaclós les trajo de regalo los uniformes de su escuela y no entiendo bien por qué a los pobres ni Santaclós los quiere y ¡mala suerte!, pero la PATRIA también son los robachicos y secuestradores a los que les tengo tanto miedo y los que están enfermos locos y encerrados en el manicomio y también las inditas que venden fruta en el mercado y hablan mal español, como si fueran niñas chiquitas y todo el mundo las arremeda y se ríe de ellas y a mí eso me da mucha tristeza. La PATRIA también es triste, escribo, mientras pienso que LA PATRIA debe escribirse con mayúsculas desde el artículo porque es demasiado lo que lleva adentro como para que le quepa en una sola palabra.
Escribo y pienso, escribo y siento; mi corazón con tesoro late mucho.
A mi eso de lo del concepto de la Patria me ha confundido mucho, mi papá decía que la patria era el PRI y que por eso hasta tenía los colores de la bandera en su logotipo, mi mamá decía que su patria era el lugar donde podía trabajar para darle de comer a sus hijos, en la escuela decían que era México y en la realidad me crié con costumbres, lenguajes y tradiciones más guatemaltecas que mexicanas; después me he ido enterando que a la Patria la tienen secuestrada unos gandallas que la explotan y la prostituyen y eso si que me encabrita tanto que hasta me dan ganas de haber nacido en Suecia o de "perdis" en Timbuctú, quién como Erasmo de Rotterdam que dicen que dijo:"Para el hombre dichoso todos los países son su patria."
ResponderEliminar