Robé poquito

 

Se llama Hilario Ramírez Villanueva y fue alcalde panista de San Blas, Nayarit. En campaña política para su reelección Don Hilario confiesa que le robó al Municipio, pero poquito porque tampoco había muchos fondos. Le gusta ser sincero, le gusta que lo aprecie el pueblo por su sinceridad. Lo entrevista Adela Micha y me horrorizo más con lo que sigue diciendo: sus estudios concluyeron al llegar a  tercer grado de primaria (como niño de 8 años) y dice que ya no necesita más estudios, eso no es importante. Me pregunto, ¿habrá escuelas primarias en San Blas?, ¿cuál será el índice de analfabetismo en esa región? Porque hay un dato muy importante y es que la gente lo quiere, lo venera y lo volvió a reelegir para Presidente Municipal, de nuevo el burrito a la silla del poder.

EL PODER Y EL DINERO.

Con lo poquito que robó Hilario le alcanzó para comprar un caballo porque él es ranchero y no usa automóviles lujosos; el caballo le costó 250 mil dólares. Hilario regala billetes a las masas que lo rodean, de a un billetito a cada persona del pueblo y de a 100 mil dólares a sus seguidores para que lo apoyen. Y, para cerrar con broche de oro: Don Hilario, ahora de nuevo alcalde del pueblo, piensa viajar a Londres porque la BBC lo invitó a contar su historia en un documental. Ojalá no sea cierto, parece de los tontos que van a los reality shows populares para que se rían de ellos, para que los insulten, para que los exhiban y ni cuenta se dan porque lo importante es salir en la tele, como sea que sea. Y como en tercero de primaria los niños todavía no tienen muy claro lo del mapamundi, a lo mejor este hombrecito en sus horas de ilusión piensa que llegará a Londres montado en su caballo.

Pero ni para qué asustarnos si el ejemplo es nuestro presidente el analfabeto, el que no ha leído ni un libro en toda su vida y ahora durante su gobierno se está tomando la maravillosa medida de exigir que los diputados tengan educación media, o sea la prepa, igual que un niño de 17 años y ya por lo menos subimos de los 8 años de edad de San Blas a los 17 del país, educación media en un país subdesarrollado. La verdad no merecemos otra cosa, mientras la educación siga siendo tan boicoteada en este país y se privilegie a los maestros ignorantes y aviadores, y no pase nunca nada ante el bajísimo nivel de nuestras escuelas, pues en esas manos seguimos.

He sido maestra durante toda mi vida laboral y desde que tengo 18 años. El último trabajo que tuve como docente de Maestría e la Universidad Mesoamericana de San Cristóbal lo perdí porque me negué a ponerle calificación de 10 al "hombre invisible" que era "sobrino del Sr. Obispo", que vivía en Guadalajara y quería un título de Maestro en Educación de una universidad en Chiapas sin presentarse a ninguna clase nunca. Otro estudiante invisible al que ví una sola vez me dijo que tenía "diez mil razones" para pedirme que le pusiera una calificación sin haber tomado el curso. Alguien por supuesto se quedó con las 10 mil razones y le dieron la calificación. Así funciona el sistema educativo en nuestro país, por eso el presidente es Presidente de México y no sabe leer.

Sin embargo... Reconozco también que hay maestros verdaderos, maestros que se preparan para enseñar, que leen, que se preocupan por sus alumnos, que de su propio dinero compran materiales educativos. Los hay, los conozco, verdaderos amantes de la educación y de su país y el día de hoy les mando una gran felicitación a nombre mío y de todos los que estén de acuerdo conmigo.