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SAN CRISTÓBAL DE LAS CASAS, CHIAPAS, Mexico
MIS LIBROS: Olivos y Acebuches (cuento), Con un padre me basta (novela), Hablarán nuevas lenguas (poesía),Mar de cristal transparente (novela), Muy Intimos Quadernos (novela), Siete casos en busca de un psicólogo

sábado, 20 de diciembre de 2014

El grinch y los pastores



Confieso ser el Grinch de la Navidad, si va a haber Navidad pues sería bueno que cayera nieve pero que todo el mundo tuviera resguardo con calefacción y que hubiera buenísima cena para todos, también que no fuera el día del pretexto para juntarse con quienes queremos y hacer fiesta porque fiesta puede haber cualquier día y eso de que nos perdonamos y nos amamos porque es Navidad pero mañana ya no, pues es algo horrible.
Pero vamos a lo de los pastores, porque los pastores de Belén son un importante elemento de la Navidad y los pastores eran gente muy pobre que vivía de criar animales y pasaba hambre y frío. Atrás de mi casa vive una familia como la de aquellos pastores, son el padre, la madre y doce hijos, la más pequeña tiene 4 años; son indígenas tzotziles y van a la escuela los más pequeños aunque dice uno de ellos que dos de sus hermanitos no aprenden nada porque no hablan español y ya la maestra les dijo a los otros que si no les enseñan a hablar bien pues que mejor ya no vayan; por cierto, Raquela hace tres semanas me dijo que no estaba yendo a la escuela, no quería decir por qué pero uno de sus hermanos dijo que porque ya no tenía zapatos.
Cuando yo era niña las cartas a Santaclós eran elegantes y sofisticadas, mis hermanas y yo pedíamos juguetes de moda, muñecas con todo y ropa extra, una televisión para nuestra recámara, y no todo nos llegaba pero sí eran verdaderos regalos como para hacernos felices. Desde entonces yo me di cuenta de que a los vecinos, que eran muy pobres, Santaclós les traías cosas horribles como calcetines o un lienzo de tela para que su mamá les hiciera ropa. A mis 7 años de edad confronté a mi abuela y ella no se andaba con miramientos: ¿Santaclós existe?, no hija, tus padres compran todo. Con razón abuela, a los niños pobres les dan cosas que ni piden y ni quieren. 

sábado, 6 de diciembre de 2014

Dios te guarde Vicente mientras nos chapulineamos


El sábado pasado murió el escritor y peridodista mexicano Vicente Leñero y le hicieron un homenaje en Bellas Artes y en todos los periódicos la nota luctuosa es la misma y habla, por supuesto, del gran escritor y periodista que fue Vicente y de la lamentable pérdida y demás, porque de los muertos no se habla mal, pero mientras están vivos pues ni quién los reconozca.
Él mismo decía que él siempre se sentía como un escritor de ligas menores desdeñado por el gremio y a lo mejor, el hecho de ser católico pesaba para esta discriminación. Yo creo que él no asumía que ser honesto es un gravísimo pecado social, decir la verdad convierte a cualquier gran intelectual en la oveja negra, a la que hay que esconder. Junto con Julio Scherer y desde la revista Proceso y el periódico Excélsior decía simplemente la verdad y las verdades políticas no deben decirse en este país.
Lo trataron de callar Díaz Ordaz, López Portillo, Salinas de Gortari y nunca aceptó censuras ni sobornos, la pasión de su vida era escribir y mentir debe haber sido para él una traición a sí mismo que nunca permitió.Vicente Leñero, ingeniero civil de profesión, amaba escribir y por eso no desdeñó ningún trabajo que se tratara de las letras y adaptó grandes novelas para el cine mexicano como El crimen del padre Amaro y El callejón de los milagros y escribió en revistas populares y para telenovelas y fue un veraz y entusiasta periodista; pero de sus novelas dice: pasaban inadvertidas.

sábado, 29 de noviembre de 2014

La novatada Ayotzinapa

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Desde que yo era pequeña escuchaba a mi padre contar sobre las novatadas de la universidad, se llamaban "las perradas" porque las víctimas eran "los perros de primer año". A mí esos relatos me aterraban, de verdad pensaba que mejor no sería escritora si tenía que pasar por la universidad o que pediría un permiso por enfermedad para entrar un mes después de que hubieran empezado las clases. Y, cuando ya estaba yo en la Prepa empecé a oir los relatos de mis primos: espantosos también. A los perros de primer año les gastaban bromas que rara vez eran divertidas para los novatos porque se convertían en verdaderas torturas; lo de menos es que los hicieran caminar atados y con los ojos vendados para que se mojaran en charcos, para aventarles huevos podridos, para cortarles el pelo, que los hicieran desfilar desnudos, que los humillaran física y verbalmente. Al lo largo de la historia y en muchos países estas novatadas son la costumbre inamovible aunque muchas campañas ha habido para que las novatadas se conviertan en bienvenidas y se celebren fiestas en vez de campos de concentración. Pero la cadena es difícil de romper, si a mí me lo hicieron, nomás espero a que lleguen los de primero y sobre de ellos. La dulzura de la venganza en vez de la dulzura del perdón, si no ¿cómo sacamos la agresividad? 
Todos sabemos que en esas perradas ha habido muertos porque se les pasó la mano a los que hicieron la broma y lo asfixiaron, lo drogaron o lo accidentaron.

viernes, 14 de noviembre de 2014

Quién les manda y Se los dije

Cuando nuestro flamante Presidente subió al poder por las ya consabidas tranzas electorales y también, reconozcámoslo, porque mucha gente del país votó por el PRI, esta imagen circulaba en las redes sociales y la guardé porque es tan divertida como patética por real. Ahora la televisión nos impone a los gobernantes y yo recuerdo que me reía de la Toña y la trataba de instruir porque ella trabajaba conmigo y lloraba mientras planchaba y hablaba de su marido golpeador y borracho; cuando yo le pregunté un día si ya por fin iba a dejarlo me dijo: mira Doñita, estoy viendo la telenovela de La Paloma y a ella le pasa lo mismo que a mí y estoy esperando a ver qué hace ella, si deja al hombre, le juro que también yo dejo al mío. Bueno, pensé yo, esta manipulación mediática agarra del cuello a esta pobre gente inculta. ¿Y hoy qué pienso? pues que una golfa de Televisa es nuestra "Primera Dama", prefiero reírme de verdad, pero me da tanta lástima mi país, ya no podíamos haber caído más bajo.
Y recuerdo a mi madre y a todas las madres: "¿quién te manda?" y "te lo dije" y también "hay unos que no entienden hasta que están como el caballo blanco: con el hocico sangrando" Y como pueblo, de verdad, ya andamos como el caballo blanco. Pregunto, ¿entenderemos?

viernes, 7 de noviembre de 2014

Carta a mi hermana Maru



Hermanita:

Quién sabe por qué en situaciones tan terribles como la de la pérdida de tu salud lo que viene a mi pensamiento todo el tiempo son los dulces recuerdos de la infancia. ¿Recuerdas que éramos lindas?, lindas, inocentes y felices porque no sabíamos nada de la vida ni nos importaba. En ese entonces nuestras mayores preocupaciones eran que nuestro papá nos llevara de vacaciones a Acapulco y que Santaclós nos hiciera caso y trajera todo lo que decían nuestras cartas.
No recuerdo nunca haber tenido celos porque naciste y porque los hermanos mayores así hacen, lo que recuerdo es que eras mi hermanita, que íbamos juntas al Colegio Francés y que yo quería siempre cuidarte del bullying que te hacían las monjas porque eras rebelde y luchabas por lo que querías como espero que lo hagas ahora.
No sientas que perdiste la palabra, las palabras no se pierden y las que te dije al oído la semana pasada las comprendiste perfectamente. Yo te mando hoy mis palabras para que te acompañen, para que quien te las lea te las deje puestas como una caricia. 
Ahora que una desgracia te ha dejado encerrada en tu propio cuerpo, sin comunicación ni movilidad, tus pensamientos deben estar volando uno tras otro y yo deseo que esos pensamientos puedan ser estas memorias que me rondan desde que te vi en el hospital y que espero no me dejen nunca: cuando aprendimos a patinar y nos llevaban a la pista de Chapultepec, cuando nos compraron una sola bicicleta para las cuatro y no nos podíamos poner de acuerdo para los turnos, cuando la tía Doralicia nos enseñaba a bailar charleston, cuando nos difrazábamos de princesas, cuando hacíamos tortillas de harina con mi abuelita en las tardes, en aquella casa de Muitle.

sábado, 25 de octubre de 2014

La caja china


¿Ya vieron la película de la que todo México está hablando? La Dictadura Perfecta es sólo una más de la serie de películas que retratan a nuestro país en toda su corrupción y barbarie. Nadie ha visto en ella algo que no sabía que está pasando: policías corruptos, ejército y narcos coludidos, secuestros creados por los gobernantes y esta vez, sobre todo, vimos el papel de la televisión para el manejo del pueblo.
Aunque sí hay algo que yo no sabía y es el término de "la caja china" para nombrar a los grandes engaños de las televisoras hacia el pueblo; se trata de priorizar cualquier noticia real o inventada para distraer la atención de lo que verdaderamente pasa en el país. Como los gobernantes están en aprietos porque ya los encontraron amigotes de los narcos, asesinos y rateros, pues se crea un secuestro en el que personas inocentes deben sufrir la ausencia de sus hijitas y la tragedia de tener que reunir una cantidad monumental de dinero que al final se reparten entre la televisora y los gobernantes.
La noticia nacional es el secuestro y es un asco ver el manejo mediático con el dolor de las personas, con la exhibición de sus vidas a todo mundo y eso lo hemos visto muchas veces en la vida real: un estúpido periodista preguntándole a la madre de un muerto que cómo se siente, preguntándole a un damnificado que qué opina de la ayuda del gobierno, preguntándole al secuestrado recién liberado que qué puede decirle al auditorio. Se necesita de verdad no tener vergüenza ni responsabilidad social para hacer esas cosas, pero así son las televisoras.

sábado, 18 de octubre de 2014

El Santaclós de Aurrerá





Sucedió en diciembre en un supermercado: Aurrerá. Un niño pobre está viendo los juguetes mientras su madre hace cola en una de las cajas, ¿que lleva la madre? 2 kilos de tortillas y una latita de chiles.
El niño de pronto llega entusiasmado a donde está su mamá y le dice: "Mamá, mamá, el Santaclós me prometió que este año me va a traer la autopista". La madre desconsolada y furiosa le dice: "ve y dile al Santaclós que no sea lengua". Ella sabe que es un mentiroso, que es pura lengua, que simplemente dice y promete y luego que se frieguen los niños que se quedaron esperando los sensacionales juguetes; los niños pobres por supuesto.
Peña Nieto promete.
Peña Nieto promete igual que el Santaclós de Aurrerá.

¿Se te ha perdido un hijo? A mí sí. Sofía de dos años y medio se me perdió una tarde en Suburbia y la encontré quince minutos después. ¿Quince minutos, horas, días, años, eternidades? A cuarenta y tres madres se les perdió un hijo hace ya tres semanas, un hijo demasiado joven como para pensar que haya muerto y por eso reclaman ellas que quieren que sus hijos regresen vivos y con ellas reclamamos todos los mexicanos, los que estamos aquí y los que están en el extranjero y también muchos extranjeros que sienten el dolor de esta barbarie. Tres semanas son tres eternidades.
Entonces el Presidente promete, como si fuera cierto que va a actuar, promete que esto no quedará impune, que los culpables serán castigados con todo el peso de la ley, que los cuarenta y tres estudiantes aparecerán y pasan los días y las semanas y las palabras de las promesas eran solo palabras como la que nombraba a la autopista del niño pobre.

viernes, 10 de octubre de 2014

Poder cantar un tango



Un taxista en Buenos Aires me pregunta ¿y a vos te gusta el tango? Sí, le digo, el tango me llega al corazón. Has sufrido, me dice, el tango no se puede cantar si no has sufrido. 

Ahora en la Iglesia Católica tenemos a un Papa que ha sufrido, ¿por qué?, simplemente porque es un Papa latinoamericano, un Papa tercermundista, un Papa que ha visto el mundo desde el lado de los de abajo. Un Papa que puede cantar el tango.
Una mujer va a una iglesia católica a confesarse porque sus hijos harán la Primera Comunión, entonces le dice al cura que es divorciada y que tiene ahora un novio. El cura le dice que lo siente mucho, "que Dios la ama" (???????), pero que no puede darle la absolución y que no podrá acercarse a comulgar. Ella se enoja, se levanta y le dice al sacerdote: mire Padre, mañana voy a ir a matar a mi exmarido y luego regreso a confesarme de asesinato porque eso sí lo perdona la Iglesia y entonces podré acercarme a comulgar el día de la Comunión de mis hijos. Se queda ella en las afueras del templo llorando, siente coraje, humillación, impotencia. Se le acerca entonces Dios y le dice: hija ¿por qué lloras?, porque no me dejan entrar a la Iglesia. No llores hija,  que te sirva de consuelo que a mí tampoco me dejan entrar. Quedémonos afuera.

Las monjitas y comunidad del Colegio Miraflores, por ejemplo, piensan que la homosexualidad es un pecado, un vicio, una desviación, y que hay maneras de prevenirla, de combatirla y, claro, de repudiarla como lo hacen ellas. Son tan monjitas y buenas católicas que recibieron al Papa Benedicto en su casa cuando él estuvo en México y son obviamente tan buenas como ignorantes como para no saber en este siglo lo de las cargas genéticas y demás evidencias científicas sobre la sexualidad. Ellas y muchas personas más, todos buenísimos católicos discriminan y agreden a quienes no son como ellos, o más bien, "como Dios manda". Por supuesto ignoran o fingen no saber que entre las familias de su comunidad hay muchos papás de saco y corbata que tienen un novio con departamentito aparte en la colonia Roma, y que hay alumnas y exalumnas que con dos cervezas empiezan a morirse de amor por su compañera. Ignoran, digo yo, la realidad misma y de esta comunidad hablo porque no la conozco de oídas sino en persona, como también puedo hablar de la del Opus Dei y la de tantos católicos muy católicos que no conocen a Dios.
Hoy el Papa Francisco decide que en la Iglesia Católica cabemos todos: divorciados, concubinos, homosexuales, lesbianas y también asesinos que se arrepienten como había sido siempre. El 19 de octubre se abrirá el Sínodo sobre la familia en donde el Papa y los obispos discutirán los temas de la homosexualidad, el divorcio y todos los que se quieran hablar. Ojalá lleguen a la mesa de discusiones el control de la natalidad, el celibato sacerdotal y el papel de la mujer en la Iglesia en la que no puede optar al Sacramento del sacerdocio porque es inferior al hombre "como Dios manda".
Por últmo y con mucho gusto les mando mi más sentido pésame a todos los católicos intolerantes y discriminadores que pensaban que esa intolerancia era mandato de Dios y nunca pudieron pensar que un Dios de Amor no podía mandar semejantes cosas.
En la Iglesia Católica hay muchísimas personas que hoy podemos felizmente cantar un tango con el Papa Francisco.

viernes, 3 de octubre de 2014

Dile ¿SÍ O NO? a la piratería

 Diccionario de la Real Academia Española: pirata = clandestino, secreto, oculto por temor a la ley o para eludirla.
Piratear= cometer acciones delictivas contra la propiedad ajena

Hace ya muchos años yo estuve en Cuba de vacaciones por una semana y muchas cosas me llamaron la atención, muchas de las que ya me habían contado: que las personas mueren por tener aparatos electrodomésticos, grabadoras y reproductoras de música en ese tiempo, las mujeres especialmente por maquillaje, medias, ropa de moda en otros lugares; también que tenían todos racionada la alimentación, que no había gasolina ni coches para casi nadie y que los cubanos nos suplicaban a los turistas que les compráramos algo en las tiendas exclusivas para extranjeros, algo tan insignificante y tan valioso como un puro cubano de la mejor calidad!!!
Sin embargo me llamó la atención algo que no me habían contado y era lo de la gente leyendo: el elevadorista del hotel iba leyendo Cien años de soledad y la recamarera tenía en el bolsillo de su vestido El siglo de las luces y el chofer del autobús llevaba Los de abajo de Mariano Azuela  y Los cachorros de Vargas Llosa, que le pedí me los mostrara.
Me fui entonces a las librerías de La Habana y traje una maleta llena de libros tan baratos que pude comprar muchos y tan casi regalados que el pueblo podía comprarlos. Con razón leen, pensé, si la cultura está al alcance de unas cuantas monedas que todos pueden tener.
Una tarde había una función de teatro: Bodas de Sangre, de Federico García Lorca, teatro español de principios del siglo XX y en verso. Cuando llegué al teatro me sorprendió la cantidad de gente que venía a la función que también costaba unas cuantas monedas: había abuelos con nietos, madres de familia, unas con su bebé en brazos, hombres y mujeres de todas las edades, bueno, ¡hasta adolescentes! Comíamos todos pepitas de calabaza tostadas que vendían en conos de papel a la entrada, eran tan elementales en el teatro como las palomitas en nuestros cines. La función fue maravillosa, el público la aplaudió muchísimo y yo aprovechaba para aplaudirle al público porque nunca imaginé esa escena tan popular en una función de teatro.

sábado, 27 de septiembre de 2014

Lázaro ¡levántate y camina!


Mi abuelita era una mujer muy sabia y muy inteligente, nos enseñó a sus nietos muchas cosas interesantes y ella me decía que Don Porfirio había sido el mejor presidente de México porque había dejado dinero en las arcas y el país había vivido en paz. Desde luego mi abuelita no fue peón de alguna finca ni tampoco tenía que conseguir sus alimentos en la tienda de raya y por eso sólo veía una parte de la moneda.
Don Lázaro Cárdenas se ganó el estar como héroe en una cara de los billetes de diez mil pesos, él y su reforma energética que, como sabemos, es exactamente al revés de la de hoy, la del presidente Peña Nieto que no alcanzará la cara de ningún billete ni moneda porque el pueblo lo detesta. Así entonces las añoranzas del gobierno de Don Lázaro son la voz del pueblo hoy en día y es que al pueblo benefició: reforma agraria con repartición real de tierras, trabajadores asociados en sindicatos, niños españoles salvados de la guerra y traídos a México, escuelas laicas y gratuitas, y la famosa "expropiación petrolera".
Una cosa más de su gobierno a mí me encanta: que fue taimado (o sea muy político) porque gracias a Plutarco Elías Calles él subió a la presidencia, pero como Plutarco quería seguir gobernando a través de él, pues Don Lázaro tuvo las agallas de mandarlo al exilio en cuanto pudo. A mí me encanta porque la historia es una rueda de la fortuna que se repite como el gato con los pies de trapo y los ojos al revés... ¿y quieres que te lo cuente otra vez? Pues ahora en nuestro país sigue gobernando Carlos Salinas, todos lo sabemos, me lo dijo un taxista ¿del D.F.?, no ni siquiera, fue un taxista de aquí de San Cristóbal y por eso digo que "todos" lo sabemos; pero ¿quién ha tenido o va a tener las agallas de mandarlo a Finlandia a esquiar? Ninguno.  Porque a ninguno le interesa el pueblo, lo que importa es el poder y el dinero que lo acompaña.

domingo, 21 de septiembre de 2014

¿Les gustó el espectáculo?


Pues sí, he visto ya la película de Cantinflas con una actuación extraordinaria de Oscar Jaenada. Me gustó saber de la vida de mi héroe, él sigue siendo mi personaje favorito (pese a haber leído tantas novelas y visto tanto cine en mi vida). Me enteré que empezó trabajando en carpas y pues, como no era lo mejor de lo mejor cuando empezó, el público lo abucheaba y le gritaban de todo (ofensivo por supuesto). El público era activo, estaba inmerso en el espectáculo y calificaba las actuaciones, en ese sentido era un público crítico el que tenía nuestro país.
Recordé entonces lo que estudiaba yo en mis años mozos en la carrera de Letras: el teatro de los Siglos de Oro en el que las carpas se llamaban corrales y eran abiertas a todo público. Allí estrenaban sus obras Lope de Vega, Tirso de Molina, también Shakespeare en Inglaterra y muchos más antes y después de ellos. Unos eran malos dramaturgos, otros buenos y otros genios. La gente iba a los espectáculos siempre, los corrales solían estar al tope porque como no había televisión,internet, tablets y todas esas distracciones modernas, pues iban al teatro. En esos corrales había algunos lugares especiales con sillas para la nobleza y personas importantes, el pueblo se situaba  atrás de ellos y veían el espectáculo de pie (cuatro o cinco horas!!!!), pero lo más interesante es que iban dispuestos a calificar y llevaban siempre verdura y fruta podridas para aventárselos a los actores y también si se podía al escritor cuando no les gustaba lo que presenciaban. Era un público crítico también.

sábado, 13 de septiembre de 2014

¿Quién le puso las flores al muerto?

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Cuando yo era adolescente mi padre andaría en sus años 50´s y como él era el hombre más precavido que he conocido compró lugares en una iglesia para los restos fúnebres de toda la familia. Supongo que él, al ver aquella mesa de su casa con cinco hijos alrededor, pensaba que así como estábamos juntos en vida lo estaríamos en la muerte. 
En ese entonces los divorcios no eran algo común, ni tampoco el que los hijos se fueran a vivir muy lejos de la casa paterna y menos a otro país; nunca supo ya, eso sí, que de sus hijos tres se casarían dos veces y hasta tres, que se separarían como hermanos y que entre sus nietos habría hermanos y hermanastros que tendrían más de cuatro abuelos entre los originales y los nuevos. Nunca lo imaginó cuando compró aquellos nichos en una iglesia "para toda su familia".
En su pueblo natal de Guanajuato las familias permanecían unidas y cercanas toda una vida y, claro está, toda una muerte también. Nunca supo que los hijos de sus hijos andarían por todo el mundo, que serían independientes, que tendrían propias familias y además que unos irían a la Iglesia los domingos como él nos enseñó, que otros serían de otras religiones y los más, de plano ateos.  
Acabo de comprar el nicho para mis restos en un lugar muy especial del mundo para mí: la Parroquia de Hércules, Querétaro y recuerdo a mi papá pensando en la familia como él pensaba que eran las familias. También he tomado conciencia de que el lugar en el que queden mis restos el día que toque debe ser consolador para quienes me quieren y ese lugar lo es; lo demás no importa porque el muerto muerto está y se trata de que no sufran de más los que quedan.

viernes, 29 de agosto de 2014

¿Más reformas educativas?

Desde hace muchos muchos sexenios cada Presidente de México en el poder lanza su Reforma Educativa la cual, desde luego, critica a la anterior por sus gravísimas fallas; que si la anterior no es inclusiva, que no contempla la interculturalidad (etnias indígenas), que no es bilingüe (inglés y computación!!!), que no reconoce los modelos europeos, que no está homologada con la educación en América Latina, que es elitista, que no prepara a los individuos ni para encontrar trabajo ni para ser buenos ciudadanos...en fin, mucha es la crítica, muchas son las nuevas propuestas y la verdad es que quién sabe cuándo de verdad la educación en nuestro país verdaderamente será eficiente.

Tomemos en cuenta una cosa, algo muy subliminal, algo muy real: quienes nos manejan desde el Gobierno saben perfectamente que a menor educación habrá un pueblo más manipulable.Hagámonos tontos, hay que cacarear con lo de la Educación, pero hay que dejar las cosas iguales porque el pueblo, ignorante en su mayoría, todo se lo cree.

 Yo les quiero hablar de la Educación aquí en un rincón perdido del país en donde vivo: San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, que es como un centro histórico y cultural para los habitantes de Chiapas. En este "centro cultural" la gente tira la basura en la calle, la cartelera favorita en el cine es la que tenga más películas de acción, aunque no tengan lógica ni argumento, las universidades particulares tienen nivel de educación media baja, las personas no conocen sus derechos, no reclaman en los hospitales donde no los atienden, ni en la oficinas de gobierno, ni a los abunantes policías que siempre quieren 200 pesos por derecho de paso y ¿para qué más decir? hay policías que no pueden levantar una infracción porque no saben leer ni escribir.

sábado, 23 de agosto de 2014

Estrenamos gendarmería

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Cinco mi elementos nuevos, o sea cinco mil policías más de los que ya hay y que servirán para "traer la paz a nuestro país" dice nuestro Presidente y también para proteger a las empresas, para combatir la corrupción, para mejorar los trabajos de inteligencia y para salvaguardar las carreteras nacionales. Un detalle importante es que los nuevos gendarmes tienen almas de alto poder y, desde luego, pueden utilizarlas cuando lo consideren necesario.

¿Y qué hay detrás de todo esto?
Detras y delante mío lo primero que hay es miedo, mucho miedo, que ya desde que mis hijas eran pequeñas yo les decía que si veían un policía y un ladrón mejor corrieran hacia donde estaba el ladrón porque lo del policía era una mala decisión. Todos sabemos que los policías desde hace mucho han sido peligrosos para la población civil: amigos de asaltantes, compinches de los narcos, protectores de políticos corruptos, camaradas de secuestradores, amigos de quienes transitan con armas y drogas por las carreteras, en resumen: unos pillos con uniforme y pistola.
Ahora los nuevos gendarmes ya no tendrán sólo una pistolita, sino armas de las de a verdad, para matar por supuesto, no son para el desfile el 15 de septiembre.

sábado, 16 de agosto de 2014

LAMINOTAS A VOLAR

La Ciudad Mágica de San Cristóbal de Las Casas en Chiapas, ciudad en la que vivo desde hace 27 años, me recordó el sádico cuento de Los Cochinitos cuyas casas, al soplido del lobo, se desbaratan.

Y la historia es así:
En el transcurso de un mes se han dado las condiciones climáticas y de deterioro ambiental necesarios para que cuatro tornados azoten la ciudad ante el grandísimo asombro de un pueblo que no está acostumbrado a ver estos fenómenos mas que en la televisión.
Del deterioro ambiental no tenemos mucho más que conocer de lo que ya sabemos: la tala de árboles, el agotamiento del suelo, los cerros antes boscosos y hoy de pura piedra. Y es que la gente tiene que comer y quemar leña para calentarse y para cocinar, me refiero a la gente muy pobre que en Chiapas abunda; y la gente con dinero tiene que explotar los bosques para tener dinero porque el mal de nuestro siglo es esa compulsión por el dinero que los corruptos, adinerados, gobernantes y demás no se alcanzarán a gastar ni teniendo las siete vidas de un gato.
Lo de las laminotas es otro asunto, muy triste por cierto.

martes, 29 de julio de 2014

Lo que el deporte sí es

Este fin de semana una niña de 9 años nos dio a los adultos una gran lección. se llama Natalia, es mi nieta, vive en Montevideo y ama los deportes. Ultimamente aprender a navegar en un barquito de vela; es su pasión.

Pero vamos a mi antecedente que es lo que me hace hablar de deportes hoy:
Veo los mundiales de futbol y también muchos eventos de las Olimpiadas y cada vez que los veo observo, con tristeza la deshumanizada lucha que son el día de hoy los llamados "deportes" que deberían ser el símbolo de la salud física y mental.
Músculos desgarrados y lesiones graves de los atletas que se esfuerzan más allá de las posibilidades reales del cuerpo humano, cuerpos deformes por el exceso de uso de espaldas en los nadadores, de piernas en las gimnastas, de brazos en los tenistas, y siempre me he preguntado ¿es humanamente sano transgredir los límites de nuestro cuerpo por una competencia? Y esto lleva hasta las hoy obligatorias pruebas de antidopping porque no puedo ganar al adversario, no puedo ser el número uno si no obligo a mi cuerpo mucho más allá de sus límites. Eso es el deporte y todos lo aplauden.
En el pasado Mundial vi más horrores, así es: cada año y cada nuevo evento el deporte es más una lucha a muerte que me recuerda las batallas medievales del Mio Cid, se trata de cortar cabezas, de matar si se puede. Un jugador muerde a otro, otro golpea con la cabeza hasta que sangre el enemigo, a otro le rompen la pierna porque la meta es el Gol, el aplauso, la fama, el dinero, etc. pero no, de ninguna manera la salud y el bienestar físico.

sábado, 19 de julio de 2014

Robé poquito

Hilario Ram�rez  

Se llama Hilario Ramírez Villanueva y fue alcalde panista de San Blas, Nayarit. En campaña política para su reelección Don Hilario confiesa que le robó al Municipio, pero poquito porque tampoco había muchos fondos. Le gusta ser sincero, le gusta que lo aprecie el pueblo por su sinceridad. Lo entrevista Adela Micha y me horrorizo más con lo que sigue diciendo: sus estudios concluyeron al llegar a  tercer grado de primaria (como niño de 8 años) y dice que ya no necesita más estudios, eso no es importante. Me pregunto, ¿habrá escuelas primarias en San Blas?, ¿cuál será el índice de analfabetismo en esa región? Porque hay un dato muy importante y es que la gente lo quiere, lo venera y lo volvió a reelegir para Presidente Municipal, de nuevo el burrito a la silla del poder.

EL PODER Y EL DINERO.
Con lo poquito que robó Hilario le alcanzó para comprar un caballo porque él es ranchero y no usa automóviles lujosos; el caballo le costó 250 mil dólares. Hilario regala billetes a las masas que lo rodean, de a un billetito a cada persona del pueblo y de a 100 mil dólares a sus seguidores para que lo apoyen. Y, para cerrar con broche de oro: Don Hilario, ahora de nuevo alcalde del pueblo, piensa viajar a Londres porque la BBC lo invitó a contar su historia en un documental. Ojalá no sea cierto, parece de los tontos que van a los reality shows populares para que se rían de ellos, para que los insulten, para que los exhiban y ni cuenta se dan porque lo importante es salir en la tele, como sea que sea. Y como en tercero de primaria los niños todavía no tienen muy claro lo del mapamundi, a lo mejor este hombrecito en sus horas de ilusión piensa que llegará a Londres montado en su caballo.

sábado, 12 de julio de 2014

Y TODOS SOMOS UNO


A mí que no me gusta el futbol he seguido algunos partidos con mucho interés porque el fenómeno personal y social que es todo este circo es, para mí, increíblemente interesante. El futbol es la Patria, es México, es cada uno de nosotros luchando por la Gloria, por un Premio, por un Reconocimiento a nivel mundial: qué buenos son los mexicanos, qué equipo es México, qué ejemplo, qué envidia, qué ganas de ser mexicano.
Aquí ya se acabaron los héroes nacionales de los libros de Historia y hasta los santos de siempre, aquí y ahora son San Memo Ochoa y San Rafa Márquez. Todos los mexicanos aficionados se convierten en un joven que patea una pelota: vamos a ganar ahora sí, me dice la peluquera de la estética, ¿Tú juegas?, le pregunto, no yo no juego pero todos los mexicanos vamos a ganar, así es.
Buscamos las emociones porque esa búsqueda es una necesidad humana, y ¿qué evento más emocionante que el de los juegos de futbol a nivel mundial? Allí en el estadio, o en la cantina, o en la casa, o en el antro se puede gritar a todo pulmón, se le puede gritar Puto al portero enemigo y seguro que desde la sala de mi casa me oye porque somos muchos y gritamos con toda el alma y desahogamos todo lo que queremos convertir en futbol, aunque desgraciadamente sean problemas y ansiedades personales que de alguna manera se descargan con tanta emoción, y aquí y ahora Puto no es ningún insulto, es la Voz de la Patria, algo así tan sacrosanto como lo de Mexicanos al grito de guerra. Y luego lo de la confluencia que significa que "todos somos uno" y así sí nos atrevemos a gritar lo de árbitro culero, todos juntos, a una voz y con toda el alma y con toda la agresión que traigo guardada para fulano y mengano que me friegan en el trabajo o en casa o en donde sea. Salen así desde muy adentro todas las emociones encerradas por quién sabe cuánto tiempo.


sábado, 7 de junio de 2014

La Bestia

foto: taringa.net


Cuando viví en San Franciso conocí a muchos paisanos míos trabajando y viviendo "el sueño americano". Un día me detuve a ver a los albañiles en una construcción, equipados como nunca se habían imaginado: cascos, botines con suelas antiderrapantes, plataformas eléctricas con barandales para subir a los pisos altos, cinturones de seguridad con ganchos y cuerdas de acero que los ataban a los edificios y a la vida, y me acordaba yo de los albañiles que construyeron la casa de mis padres, amarrados con mecates para colar los pisos altos, con unos tenis rotos porque eran sus únicos zapatos, sin cascos, sin más ropa que la que traían puesta. Estando en esto uno de ellos se me acercó, le pregunté su nombre: Pancho para servir a asté; oye Pancho estoy impresionada de la seguridad con que trabajan aquí, parecen ustedes alpinistas con tanto equipo, sí señito acá así es y el pago es en dólares. ¿Cómo llegaste acá Pancho?, en la Bestia seño, yo sí lo logré, ¿cómo que tú sí?, yo sí y mis cuatro compañeros no, entre los maras, los zetas, los narcos y los que se quedan dormidos y se caen del tren. Qué bueno Pancho, me da mucho gusto por ti.

Me fui apenada, ¿de verdad me daba gusto por Pancho?, y ¿qué tal por la familia de Pancho?, la mujer que dejó en Guanajuato o sabe dónde, los hijitos que trabajan a los 7 años de edad para que todos en la familia puedan comer. Y, por otro lado, si Pancho no llega y gana ahora en dólares disfrazado de alpinista, ¿qué sería de esos niños, de esa mujer y de todos los que dependían económicamente de él? Pues muertos de hambre ya sabemos porque el Gobierno Mexicano es sólo palabras y palabras, ya sabemos.

sábado, 3 de mayo de 2014

Las buenas cabras



 

Hace años y cuando yo estudiaba la Preparatoria en un colegio de monjas, yo tenía quince años y me sentía lo suficientemente madura para refutar aquello de que el infierno es un lugar con llamas donde la gente mala se quema, un lugar de sufrimiento eterno. Cuando lo dije en la clase de Religión fui regañada y, gracias a Dios, ya en esos tiempos no había Inquisición de la que sí quemaba a la gente y por eso sólo fui humillada por no creer en lo que Dios dice. Fue en ese tiempo también que yo conocí a Franz Kafka quien fue una revelación extraordinaria para mí porque al leer La metamorfosis me vine a enterar que los escritores podían decir lo que quisieran, podían mostrar la realidad que ellos inventaban o veían, o en la que creían, porque Gregorio Samsa, el personaje de Kafka, simplemente se levanta una mañana de su cama, pero no se levanta sino que se cae de la cama porque ya no es un ser humano sino un gran cucaracho. En aquel entonces yo ya era escritora y sabía que lo sería para toda mi vida así es que escribí un cuento que mandé a un concurso, el cuento se llamaba "El infierno" y fui inmensamente feliz al recrearme con palabras en un infierno sin llamas ni diablos, en un infierno donde el alma solamente vagaba buscando eternarmente algo que no encontraba. Gané el concurso y fui por un tiempo el orgullo de la escuela: la niña escritora, sin mencionar, claro está, que la niña escritora era rebelde a lo que enseñaba la Iglesia Católica.


sábado, 5 de abril de 2014

La sartén por el mango


¿ A quién de nosotros no le ha pasado que se encuentra con una autoridad  que tiene el poder de hacernos daño? Y esa autoridad es como cualquier ser humano, como tú y como yo, pero le han dado un puesto, un título, es el coordinador, o el jefe, o el Secretario (con mayúscula), o el dueño de la empresa, o el Director de la Institución y a veces, muchas por cierto, es el subjefe del subjefe del jefe, pero está encima de mí en el organigrama institucional y yo debo obedecerlo y también caerle bien.
Esas personitas (pequeñas, humanamente muy pequeñas por cierto) son de las que se suben a un ladrillo y se marean, disfrutan del poder, de dar órdenes, de tener vasallos y ni idea tienen de las dimensiones de su poder, que generalmente se reduce al espacio de un centro de trabajo. Fuera de allí son nadie y pueden ser hasta víctimas de violencia familiar en sus hogares, pero en el trabajo... es el lugar ideal para desquitarse de sus frustraciones y de la pobre autoestima que tienen.
Las he tenido que sufrir y tiendo a confrontar, desde siempre, desde que iba yo a la primaria porque son personas injustas, crueles, gozan haciendo sufrir a otro y sintiéndose dueños de vidas ajenas. Desde aquel tiempo mi padre me enseñó algo muy interesante, se llama: FINGE, finge que te caen bien, finge que son grandiosos y tú lo sabes, finge que respetas su poder, finge que son encantadores, finge, finge, es tu tabla de salvación.
Obviamente yo le refutaba esa posición y le decía que cómo un padre puede enseñarle a su hija a ser hipócrita y él me dijo muy claramente una vez: llámale como quieras hipócrita, tonta, barbera, pero la acción de fingir significa "cuidarte a ti misma", si confrontas te expones a que te echen de la escuela, del trabajo y de donde se pueda, mientras esa o esas personas tengan el poder sobre ti hazles creer que las admiras y eso es tener la sartén por el mango porque tú estás tomando la decisión de engañarlos para que un día, si Dios te lo permite, y cuando ya no estés bajo su autoridad puedas refrescarles la memoria y decirles lo que quieras.
Desgraciadamente para mí no quedé convencida con el consejo de mi padre y así pasó la vida.

sábado, 29 de marzo de 2014

La Patria y Yo



Hace muchos años y cuando yo era niña me dejaron una tarea tan difícil que aún hoy la recuerdo. Se trataba de escribir una composición sobre La Patria y yo no sabía ni siquiera si la patria era nombre propio o nombre común y si se escribía con mayúsculas o con minúsculas. Para mí la Patria era una señora enojada que estaba en la portada de todos nuestros libros de texto, llevaba cargando la bandera mexicana como si la hubieran obligado, atrás de ella había unos monstruos terribles como de Jurasic Park y resulta que eran el águila y la serpiente del escudo nacional. En fin, este asunto de la Patria en los libros era tan feo que yo siempre le pedía a mi mamá que me forrara mis libros de papel manila para no verla.
Y ese día... ese espantoso día tenía yo que escribir dos cuartillas completas sobre la patria, o La Patria, ¿o LA PATRIA?

sábado, 22 de marzo de 2014

¿Qué significa desaparecer?


Siempre me han impresionado las escenas de las películas en donde una persona va caminando por la calle que tiene árboles, niños jugando, coches que pasan y de un momento a otro ya sólo están los árboles, los niños y los coches. Significa que desapareció, generalmente porque murió y a veces por quién sabe qué. Son esas desapariciones como las de la puesta del sol, que se hace cada vez más pequeño hasta que ya no está donde estaba y eso significa desaparecer de nuestra vista, mas no dejar de existir.
El avión que salió de Kuala Lumpur hace catorce días y desapareció puede o no haber dejado de existir y la falta de información es como la falta de diagnóstico médico: un verdadero calvario para quienes la esperan con ansia.Y es verdaderamente increíble que en este siglo y con tanto desarrollo tecnológico pueda suceder algo así, que un avión con sus más de 200 pasajeros simplemente se pierda como dicen las leyendas que se pierden las naves marítimas y aéreas en el Triángulo de las Bermudas, o como dice nuestro compatriota Jaime Maussan, que se los llevan los extraterrestres.
Recuerdo que hace años viajé de Tuxtla Gutiérrez a la Ciudad de México y mi hija Sofía fue a esperarme al aeropuerto. Durante el vuelo los pasajeros nos dimos cuenta de que el avión estaba demorado porque ya llevábamos como hora y media sin noticias de que ya llegábamos. Cuando finalmente, después de dos largas horas, llegamos al aeropuerto me encontré a la salida el loco abrazo de mi hija que lloraba como con muerto tendido y se aferraba a mi cuello con desesperación. Entonces vi que a todos los pasajeros a quienes sus familiares esperaban les pasaba lo mismo, había gritos, llantos, reclamos, risas y todo un caos. Mi hija me explicó entonces que, como se estaba tardando el avión, habían ido varios familiares a preguntar por la demora y la señorita del mostrador les dijo que habían perdido contacto con el avión y que no sabían dónde estaba: así nomás. Como si perder el rastro de un vuelo fuera cualquier cosa y por más que exigieron y gritaron y clamaron los familiares sólo les dijeron que el avión estaba desaparecido.

sábado, 1 de marzo de 2014

La biblioteca con pájaros

Hospital de las Culturas. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas.
Cuando estudié, hace ya muchos años, Ciencias de la Información y Biblioteconomía pertenecí a un grupo privilegiado que era la primera generación de esa Maestría y además un Posgrado de Excelencia Conacyt. Eso significó para nosotros los estudiantes que tuvimos maestros extranjeros quienes nos enseñaban las nuevas tecnologías en archivos, blibliotecas y en el mundo de la información: todo era fascinante, todo lo posible ya automatizado; aprendimos normas para construir el edificio de biblioteca, normas para generar las colecciones especializadas, o de escuelas o de investigación. Estudiábamos en inglés, no había aún en español semejantes modernidades. Todo fue tan perfecto que terminamos nuestros estudios muy entusiasmados y deseosos de empezar a trabajar. 
Pasado un mes me llamó uno de mis compañeros: el de Sonora y me dijo que estaba frustradísimo y enojado, que tenía un gran problema. Yo le dije ¿qué problema?, ¿teórico o práctico? Un verdadero problema, me dijo, ¿te acuerdas de todo lo que estudiamos y lo que aprendimos sobre el modelo de una buena biblioteca? Pues nada, la biblioteca de la Universidad de Sonora, en la que estoy,  ha estado a cargo de una señora que tiene plaza fija, nadie la puede despedir y tiene todos los pasillos y todos los estantes llenos de pájaros en jaulas. Hay muchos más pájaros que libros y no los piensa quitar. ¿Sabes para qué sirvió todo lo que estudiamos? Para una mierda. Tienes razón, le dije una cosa es lo que se enseña en la teoría, lo que se dice y otra es la realidad, sobre todo la nuestra: la mexicana.

lunes, 24 de febrero de 2014

Y EL VOLCÁN EXPLOTÓ


Cada vez que veo y escucho noticias sobre el Popocatépetl y sus humos y sus cenizas y la alerta amarilla y luego de otros colores recuerdo Pompeya porque, aunque yo nunca he estado allí, soy especialista en Pompeya y el Vesubio. La tragedia del volcán destruyendo esa maravillosa ciudad me ha quedado de muy personal manera en el alma desde que viví la ayuda a los damnificados de San Juanico, la población que fue arrasada por el gas y el fuego de la planta de Pemex y, como sucede en este país con los poderosos, nunca apareció el culpable de la falla que ocasionó la Pompeya Mexicana. Pompeya en Italia fue víctima de un desastre natural. San Juan Ixhuatepec en México fue víctima de negligencias humanas y corrupción que las escondió.

Ayer vi la película comercial sobre Pompeya, muy hollywoodense, con mucha sangre y peleas, muchas fugas extraordinarias del fuego, romance por supuesto, y gladiadores y romanos dándose con las espadas mientras la ciudad se quema, eso sí es como de Disneyland porque la gente en esas situaciones no se pelea con nadie, solo huye, pero en fin, el pueblo en el cine se divierte y les aplaude a los buenos, que son los que ganan. Sin embargo y, gracias ahora a las computadoras, las escenas de la ciudad y el mar con su volcán de fuego son espectaculares y el mensaje es el mismo que en los documentales de Discovery y en los libros de historia: en cualquier día de trabajo, paseo, fiesta o lo que sea del día, pueden tú y tu mundo quedar destruidos en un momento. Y eso es lo que yo tengo grabado en el alma desde el día en que vi San Juanico como quedó Pompeya: con humanos calcinados en el momento mismo de alguna de sus actividades cotidianas, los unos abrazados, los otros corriendo, los otros tirados en el suelo protegiendo su cabeza con los brazos o protegiendo a sus hijos con su cuerpo.

lunes, 17 de febrero de 2014

LOS NINIS

   
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El blog de hoy con especial dedicatoria y admiración a Poncho, Mauricio y Mario Aurelio y a todos los jóvenes como ellos.

Empiezo diciendo que el fenómeno de los NINIS: jóvenes que NI estudian NI trabajan es mundial, es un fenómeno de nuestros tiempos, como las generaciones rebeldes y contestatarias de los años 60s: otro fenómeno de aquellos tiempos, siempre con una raíz de la que emergen.
A las generaciones de los adultos suelen parecernos equivocadas y dañinas las actitudes de los jóvenes y hoy quiero hablar de los muy jóvenes, de los quinceañeros y veinteañeros que son NINIS. Los he tenido como pacientes y como alumnos y parecen no sufrir, nada les importa, no tienen planes y menos, proyecto de vida. Viven el día presente, se entretienen con las relaciones entre ellos y nada les preocupa ni los hace pensar. El hecho de que estén inscritos en una escuela o en una universidad y acudan diariamente a clases no significa que estudian, se esfuerzan lo mínimo para pasar los semestres sin que sus padres los reprendan, así entonces lo que estudian para el examen de hoy mañana ya lo olvidaron porque no les interesa nada. Los otros maestros tienen las mismas preocupaciones y problemas que yo con ellos, las clases se han convertido en un eterno mirar el reloj tanto ellos como nosotros a ver a qué hora podemos dejar de vernos.

viernes, 7 de febrero de 2014

¡QUIERO MORIR!

 
elefanteviajero.blogspot.com
Definitivamente la muerte es el acontecimiento que más marca la vida de los seres humanos porque durante toda ella la tienen presente, saben que es inevitable y le temen. También la aborrecen cuando se presenta a los seres queridos, cuando deambula por habitaciones y hospitales alrededor de los enfermos, cuando acecha en cualquier viaje, en cualquier noche, impredecible siempre.
El día que empecé a leer la maravillosa novela de José Saramago, Las intermitencias de la muerte sentí un alivio maravilloso ante su solución con la que empieza la novela: la muerte ha sido decretada muerta, la muerte ya no existe, ya nadie morirá. Confieso haber querido en ese momento ser parte de la sociedad de la novela.

Y empieza así el relato: Al día siguiente no murió nadie.
La sociedad a la que me quise unir en ese momento está feliz porque las personas se dan cuenta que el espectro aterrorizante de la muerte ya no existe, ya no hay que sufrir más por ella. Así entonces, los enfermos no empeoran, los accidentados tampoco, ni tampoco los enfermos terminales porque todos quedan pasmados en un estado de enfermedad que no evolucionará.
Muy al estilo Saramago éste es un problema que afecta a una sociedad como la de aquellos que quedaron todos ciegos (Ensayo sobre la ceguera) y son precisamente problemas sociales los que surgen cuando el orden natural de las cosas cambia totalmente. Empiezan los problemas religiosos porque la Iglesia cae en crisis, si no hay muerte no hay resurrección y ahora ¿qué decimos?, y sigue la crisis de las funerarias que se quedan sin muertos y la de los seguros de vida que todos empiezan a cancelar.

sábado, 1 de febrero de 2014

Mi abuelo y yo

A la memoria de mi abuelo Donaciano

La primera vez que volví a ver a mi abuelo el recuerdo me estorbó porque yo andaba en otros pensamientos. Él estaba allí, tercamente parado, con su sombrero de hongo grande en la cabeza, serio y enojado, como él era siempre. Quise olvidarlo pero fue imposible, él regresaba; cada vez que yo perdía vigilia, él estaba. Llegaba de noche o de mañana, en horas de sueño o de insomnio. En aquel entonces mi abuelo tenía quince años muerto y en realidad y no estaba en este mundo ni como recuerdo, por eso es que volvió.

Una tarde de lluvia lo encontré en mi memoria y por tanta humedad en todos lados -afuera de mí y entre mi cuerpo y mis huesos- sentí necesidad de buscarle los ojos hasta que los encontré: nublados, con agua contenida porque los hombres no lloran. Una sola mirada de un instante y comprendí: mi abuelo no había podido recorrer el camino que dicen que hay tras de la muerte, no había podido cruzar el puente, el túnel y todo eso, no había podido ver la luz. De momento la certeza me causó rabia, ¿por qué a mí? Rezar por él era la consigna: Rezar. Eso nos dijo a los nietos siempre en vida el viejo: hay que pedirle a Dios por los difuntos, cuando yo me haya ido sus oraciones van a acompañarme al otro lado. ¿Lo prometen?, lo prometemos Abuelo Donaciano. Lo prometido es deuda, por ti nos endeudamos. Y no más. Murió el abuelo, se dijeron las misas, se cantaron responsos y alabanzas, se rezaron rosarios y en todos los ritos funerarios recuerdo haber estado perdida en distracciones, en otros pensamientos como siempre. Ahora quince años después, yo tenía que rezar por él y con él para ayudarlo a caminar a su destino, ese era el remedio y esa su petición, lo prometido es deuda.


Mi abuelo era para mí regaños, palizas de bastón, desprecios. Yo fui nieta y no nieto y para un abuelo del siglo pasado las mujeres no servían para nada. Frente a mí prometió como herencia sus tesoros a mis primos: el reloj con la cadena de oro, la escopeta y el bote con monedas... En una lucha me instalé, en un mar de querellas y así pasaron días, semanas, meses sin mis rezos. A mi memoria seguía llegando el viejo con sus ojitos de agua contenida y de tanto mirarlos me ablandé, me hice como esponja mojada, como cara con lágrimas y empecé a andar con él cada vez que me visitaba. Niña fui. Mujer niña soy y te acompaño abuelo aunque a mí no me dejaste nada, sólo me arrancaste (a fuerzas, lo confieso) aquella promesa de la deuda, lo prometido es deuda. ¿Me quisiste?, ¿me quieres?, ¿nos queremos tú y yo?

Larguísimas jornadas caminamos a través de los rezos. Caminamos los dos, juntos los dos y casi sin mirarnos; su sombrero de hongo caído sobre el rostro ayudaba para no vernos. Larguísimas jornadas, pesadas por interminables porque los profundos rencores me jalaban a desandar lo andado. Las mujeres no sirven para nada, ¿y a mí no vas a heredarme nada abuelito? A las mujeres no, que les dé su marido cuando tengan. A ti Nada. Sin embargo... la mirada tristísima de mi abuelo me empuja a empujarlo a través del puente y del túnel que hay detrás de la muerte. Perdónalo Señor, repito muchas veces; rezar se vuelve la costumbre, a mi lado caminan las ánimas en trance, sus débiles quejidos de noche me sacan de mis sueños y de día distraen mis pensamientos. Rezar por él se vuelve rutina entre mi sangre y en agua y sangre se van diluyendo los recuerdos: el bastón, las palizas, los regaños.

Me abandonó. Lo abandoné. Un día se me perdió y ni cuenta me di porque, como dije, yo andaba siempre en otros pensamientos. Rezar era costumbre y todos los muertos gozaban de mis rezos porque el abuelo ya no estaba ni en mis más largas noches de tormentos sin sueño, ni en mis más arduos días de tantos pensamientos. Otra tarde de lluvia tuvo que suceder para que yo me percatara de la pérdida: mi abuelo ya no estaba y yo tenía un dolor nuevo entre mi pecho, lo extrañaba. Ese día quise volver a ver sus ojitos tristes con sombrero de hongo coronándolos: pero él ya no estaba. La mirada tristísima del viejo se me había hecho sombra que de día y de noche me acompañaba sin que yo lo notara. Las sombras no se ven, tan sólo se adivinan y esa tarde la adiviné con todas las fuerzas de mi alma para verlo de nuevo: pero él no estaba.

Fue una noche. Una espantosa noche en que me vi envuelta en un asesinato del que yo no era culpable, y es que yo no sería capaz de matar a nadie aunque los curas digan que también se mata con las palabras. No, yo no podía ser culpable pero la gente lo creía y yo, aterrada, empezaba a dudarlo porque turbas de gente venían para apresarme, aniquilarme y un escalofrío de muerte me recorría el cuerpo entero. Y allí yo me revolvía entre las sábanas sin poder darme cuenta que soñaba. De pronto: EL. Del más profundo fondo de ese sueño salió el viejo con blanquísima camisa nueva y sin sombrero, sin el sombrero viejo de hongo que le tapaba la mirada. Radiante estaba el viejo, irreconocible, hermoso.
Me vio, lo vi.
Entonces el viejo vino y me abrazó y así, aferrada a su cuerpo yo pude huir de la espantosa turba que me acosaba. Caminamos de prisa, abrazada yo a él, mi única esperanza. Y sucedió: todo el amor guardado me envolvió, ya no hubo entonces más recuerdos tristísimos de rencores pasados. El calor de su pecho era cobijo cálido y no había más, ni gente tras de mí, ni miedo, ni tristezas. Alcé la cara para verlo de nuevo y encontré sus ojitos mirándome con fuerza. 
Ya no eran ojos de agua contenida, eran de sol.       
     

lunes, 27 de enero de 2014

La historia del mantel


Rosa es una indígena tzotzil de Zinacantán (Chiapas), es hermana de Cata quien me ayuda en casa y ambas son unas verdaderas artistas del bordado. Hace un año Rosa estaba muy necesitada de dinero (como siempre) y me ofreció hacerme un mantel para mi mesa del comedor, uno grande me dijo, no me des mesa chica. Me lo dijo en tzotzil y me lo tradujo al tzotzespañol su hermana porque Rosa es monolingüe y Cata semibilingüe.
Le pregunté cuánto me iba a costar y me dijo que no sabía aún, también me dijo que qué dibujos quería y le dije que se lo dejaba a su elección, que ella hiciera lo que le gustara porque artistas son y lo reconozco muy bien. Me pidió 200 pesos para empezar a comprar los hilos. Le di una cinta de medir para que calculara el tamaño y no supo qué era, pero sacó de su bolsa unos hilos y con ellos midió a lo largo, cortó el hilo, a lo ancho, cortó el otro hilo y así dos veces porque tenía que llevarse las cuatro medidas del rectángulo en hilos. A los tres meses me pidió otros 200 pesos para más hilo y no volví a saber de mi mantel en 6, 8 meses más.
Le preguntaba yo a su hermana que cuánto iba a costar el mantel y me decía que Rosa no podía saber el precio hasta que acabara de hacerlo y contara los carretes de hilo que había gastado. Rosa no sabe los números, ni las sumas, ni las multiplicaciones, no sabe que con una pequeña parte del mantel elaborado se puede calcular el gasto completo. El problema es que ni lo sabe ni me creyó que sí se puede hacer de esa manera.
Cerca de un año después del trato llegó un día Rosa a mi casa con mi mantel terminado y con otra hermana semibilingüe también. Me dijo: aquí está tu mantel y son 5 mil pesos. Pues es precioso, me encanta, tu trabajo es maravilloso pero no tengo 5 mil pesos en mi bolsa ni en mi casa.
Rosa no se va a ir de tu casa hasta que recibas el mantel y le des los 5 mil pesos me dijeron las hermanas.
-Pero yo no sabía cuándo ibas a venir Rosa
-Pues ya vine
-Pero no me avisaste, yo no tengo el dinero ahora
-Tú lo pediste, tú lo pagas
-Sí, yo te lo pago pero tú no puedes llegar cualquier día sin avisar a cobrarme 5 mil pesos
-Tú lo pediste
-Te puedo dar una parte del dinero ahora y después te mando lo que falta, en cuanto yo pueda
-Aquí está tu mantel, aquí quiero mi dinero
-Rosa, por Dios, que no tengo el dinero en este momento
-Tú lo pediste
-¿Por qué no me fuiste pidiendo adelantos o me dijiste cuánto iba a ser?
-No se puede saber precio hasta terminar
-Bueno Rosa, pues véndele el mantel a otra persona porque yo no tengo ese dinero ahora. Busca a alguien que te lo pague hoy.
-No, el mantel tú lo pediste, tú lo pagas

Por Dios, pensé, es posible que me entienda yo mejor con un extraterrestre que con esta indígena, no sólo hablamos lenguas diferentes sino que vivimos en mundos diferentes y eso de la interculturalidad, reafirmo, son discursos políticos, esto es imposible.
Finalmente accedió a recibir la mitad del pago ese día y la otra mitad quince días después. Estaba enojadísima conmigo y yo con ella, ni ella me entendió ni yo a ella. Y las hermanas semibilingües, sólo semientendieron.

sábado, 18 de enero de 2014

MAD MEN




Mis hijos tuvieron el acierto de regalarme en Navidad el paquete completo de cuatro temporadas de esta serie de TV. Me gustan las series, me generan adicción y, teniéndolas completas, pues vivo el gusto de no tener que esperar una semana para ver el capítulo siguiente.

Sin embargo... esta particular adicción me tiene sumida en demasiadas consideraciones. Son las décadas de los años 50 y de los años 60: mi niñez en la pantalla. Mis hijos están muy impresionados con la manera de tratar a los niños en esa época: los adultos los envían a su recámara o a ver la televisión constantemente, los niños no opinan, los niños obedecen siempre, las actividades de los adultos son exclusivas de ellos porque si hay visitas a cenar los niños saludan y se suben a dormir y si hay cena de Navidad los niños se van temprano a la cama o no viene Santa Claus. Me dan risa las terribles críticas de mis hijos a esos adultos y de su conmiserción por esos pobres niños, me da risa porque yo era una de esos niños, así me criaron mis padres en los años 50s y 60s y no sufrí como las nuevas generaciones piensan que habré sufrido, nuestro mundo infantil era aparte y la verdad nos divertíamos mucho sin nuestros padres, valga decir también que en nuestras familias éramos por lo menos cuatro hermanos y había de ocho y hasta de doce. Hoy las actitudes se han polarizado y el mundo de los adultos gira alrededor de los niños, los niños opinan, los niños exigen explicaciones, los niños ven la televisión controlada por sus padres, los niños son el personaje principal en fiestas y cenas y yo no sé cómo viven los hoy padres esta situación, no sé si les estará faltando espacio para su propia vida social y de pareja. Pero esto ya nos lo dirá la generación de mis nietos. Esto siempre es así.

sábado, 11 de enero de 2014

El jabón Camay y la Reforma Energética

imagen es.coloribus.com



Dice en una de sus cartas San Pablo, y dice bien: "cuando yo era niño, pensaba como niño" y así fue, yo a los 8 años pensaba como niña y le creía a la televisión, me encantaba ver la magia de la publicidad porque, como niña, creía en la magia. Sin embargo, no era yo la única porque mis hermanas y mis primos eran niños también y entonces la televisión era la gran maravilla de nuestros tiempos y fuimos unos teleadictos todos.
Una tarde mi primo Gabriel llegó corriendo a buscarme para hacerme saber una observación importantísima que había hecho: "me bañé con el jabón Camay, con mucha espuma y ¿sabes qué? no es cierto lo que dicen en la tele porque la piel no me quedó de seda, me quedó rasposa". Yo apenas lo podía creer pero en realidad no le vi brazos de seda cuando me lo contó y aún tenía el pelo mojado de recién bañado. Desde entonces y gracias a Gabriel desconfié de la publicidad y, no puedo negarlo, desconfié para siempre porque me sentí vilmente engañada y a mí no me gusta que me engañen.
Con el paso del tiempo les enseñé a mis hijas a ver y escuchar con inteligencia y a probar por sí mismas que los jabones no dejan los trastes impecables sino que hay que tallarlos, que no hay yogurts ni chocomilks, ni pan vitaminado que haga crecer a los niños, que las sopas no significan amor de madre ni son abrazos los suavizantes de telas... en fin. Año 2014 ya y seguimos con lo mismo y la gente compra cremas que quitan las arrugas, fajas que adelgazan 10 kilos en cuatro días, vitaminas que retardan el envejecimiento, curas contra el cáncer y sartenes que hacen que la comida no engorde. Y aún hay más y más grave...